La guerra del Dragón y el Leon
Preludio 2
Manifiesto de Alastar
Todo comenzó hace 1000 años, en una ocasión seguí a mi padre a lo que sabía sería un gran encuentro, había descubierto durmiendo a otro dragón más cerca a las cuevas que había reclamado como su territorio y haría respetar sus dominios, como era lo debido en Aragonessem, la batalla fue fiera y el que resultara ser un viejo dragón logró destruir a mi padre, sin embargo mi progenitor lo dejo lo suficientemente herido, y el gran dragón dorado pasaba también sus últimos momentos.
Salí de las sombras y me dirigí a observar el decadente Wyrm, este me observo y con una sonrisa contemplo la ironía de que una pequeña cría viniera a terminar el trabajo. -al menos fue una buena batalla contra otro de mi clase- dijo con una sonrisa -No como será tu destino.
Al terminar con la vida del dragón dorado este con su último aliento me transmitió una visión, la espada de un humano, cubierta en sangre de dragón, de aquel según el Dorado que llevaría a la extinción a todos los de nuestra clase.
En un principio no tome en serio la amenaza, había tenido la suerte de estar en un evento difícil de conseguir, toda la riqueza y magia del viejo dragón eran ahora míos, oculte la evidencia de la desaparición de este y durante un tiempo disfrute del poder que comenzaba a adquirir.
La profecía comenzó a ser una molestia en mi subconsciente, las noticias de varios de mis hermanos y familiares muriendo a manos de humanos me hicieron inquietar, en una ocasión luchando contra un dragón Azul de mi categoría ambos por casualidad tocamos el tema y esto nos dio pausa, la profecía de la que había hablado el Dorado era material usual entre nuestros adivinadores. Era demasiada casualidad.
Otros dragones con preocupaciones sobre esto y similares habían creado un consejo entre los representantes de cada raza de los de nuestra clase, con tregua latente entre los miembros que allí pertenecían y que fueran capaces de sobrevivir a través del tiempo, El concilio Purpura se llamó.
Aragonessem estaba bastante controlado, el Concilio confiaba en que entre ellos y otros dragones más viejos que influenciaban las vidas de todos aquellos que vivían allí podían garantizar que no hubiera una amenaza lo suficientemente grande que se pudiera levantar ante ellos, este claro no era el único problema, así que yo y algunos afiliados decidimos aventurarnos a otros continentes para observar posibles cuestiones de interés.
Moviéndome a través de los continentes unos 300 años después llegue al continente sur, un sitio donde los juegos de poder por territorio eran entretenimiento diario y la riqueza en magia y potencial diversa.
La primera vez que encontré humanos dignos de atención fue 50 años después de mi llegada, un extraño evento en el océano al sur del continente había hecho surgir una torre del mar, los nativos de la costa la llamaban “Elkistar”, lo cual en su primitivo lenguaje parecía significar “venido de otro mundo”. Efectivamente esta torre estaba señalada como el basurero de otro plano, sin mucho interés en semejante cosa, no me acerque mucho al sitio, sin embargo estuve lo suficientemente cerca para darme cuenta que tres humanos lo habían hecho y habían sido presas de tres seres planares que estaban de paso.
Los tres seres eran un vampiro elfo de considerable poder y un Orco hombre lobo, estos eran comandados por un humano llamado Aní Lom, que estaba interesado aparentemente en regar la progenie de estas criaturas en el continente.
Los tres humanos aventureros fueron cambiados, uno de ellos progenie de vampiro, el otro presa de la licantropía del orco, el destino del último fue más cruel, pues fue convertido en una especie de constructo pútrido de Carne, que con su toque convertía a otros en seres similares.
Los progenitores dejaron el plano cumplida la tarea de regar su estirpe, esta comenzó a sembrar el caos en el continente y múltiples grupos respondieron a la amenaza que significaban aquellos que fueron llamados “Los primeros”. Ocultándome hábilmente entre aquellos que podían intentar adivinar mis intenciones pude catalogar varias familias de humanos notables e incluso prestar mis servicios para encerrar a los primeros una vez que fueron derrotados, esta clase de acciones le produjo una ventaja social considerable a mi identidad alterna del tiempo y pude eliminar discretamente todo aquel humano que empezaba de manera rápida a ganar poder.
Durante este tiempo en la zona norte del continente, el territorio conocido como los Siete Reinos un escándalo surgió, aparentemente los enanos de las montañas habían de alguna manera robado el manuscrito del ritual que había convertido los habitantes de estas zonas en criaturas hibridas y se habían internado en las montañas de Catarquia, su reino bajo la montaña para repetir el ritual.
Una partida de diferentes representantes de los reinos viajo a Catarquia para recuperar la antigua reliquia, interesado por la magnitud de poder que podía convocar dicho ritual, moví mis influencias para hacer parte de la compañía que iría a este sitio, disfrazado como un elfo, viaje con un grupo representativo de los cada reino local, especialmente haciéndome amigo de aquellos del reino Aeruta, descendientes de alguna manera de la herencia dragón.
En Catarquia era ya demasiado tarde, los enanos ambiciosos de convertirse en el octavo reino hibrido invocaron una criatura para realizar el ritual de hibridación, pero esta no estuvo dispuesto a sacrificarse y trajo aun algo más siniestro que desde las sombras convirtió a Catarquia en una tumba de la que pocos tuvimos oportunidad de escapar. El manuscrito del ritual se había perdido, poco tiempo después tuve la oportunidad de saber que el uso por segunda ocasión del ritual con una nueva criatura comprometía parte del ritual inicial, condenando a los habitantes de Devilstad a quedar encerrado dentro de sus dominios.
Una consecuencia inesperada del asalto a Catarquia fue que alguien más había leído parte de su contenido y se había dado a la tarea de construir algo similar, se trataba del humano Xion. Este tomo uno miembro de la progenie del vampiro Laceret de “Los Primeros” y efectuó una versión severamente reducida del ritual con el que logro que él y parte de su familia descendencia fuera convertida en vampiro.
Decidí no prestarle mucha atención a tan miserable y fallido intento en la búsqueda de poder, explorando el occidente por donde Xion y la familia Heart se desenvolvían, me vi sorprendido de hallar la presencia de un antiguo de mi clase, disfrazado de un viejo hechicero ciego y rondando los bosques un “Gran Wyrm “ de bronce
El enfrentamiento entre los dos fue inevitable, pero era demasiado para mí y hui a las montañas cercanas, hallando un grupo de grutas que pude limpiar de drows y hacer mi refugio.
Durante mi tiempo de recuperación, me arrepentí de haber dejado a Xion hacer lo que quisiera, al parecer la hibridación con vampiro había sido solo el comienzo de su nefasto plan y después de sacrificar por completo el reino y desecrar casi completamente la tierra a su alrededor, el humano usando el poder de las almas se ascendió a divinidad.
Xion desapareció completamente y pasaron varios años, había vigilado a los Heart y a su muerto terreno, eran comandados por la pálida descendencia de Xion, que en ocasiones no eran ni siquiera capaces de abrazar su herencia vampírica completamente. Había Investigado a fondo los posibles métodos que había usado para alcanzar la divinidad, en cualquiera que fuera, si quería reafirmar su condición en algún momento tenía que crear un avatar y formar un culto hacia él, ambas cosas estaban ausentes. En el último mes del año 350 después de desaparecer, tuvo la oportunidad de encarnarse en uno de los gemelos que eran actualmente los regentes del reino.
Lance un ataque con todo lo que tenía, debía impedir que semejante aberración tomara el poder que necesitaba, logre destruir al gemelo en el que se había encarnado, pero los poderes que había adquirido le permitieron rápidamente trasladarse al otro hermano, absorber el daño hecho y el alma de su hermano como más poder, logre hacerle daño considerable para evitar que su ascensión fuera completa, pero la derrota fue mía. Sus súbditos y adoradores me persiguieron hasta mis dominios y allí dentro, me encadenaron a mi propio recinto, con cadenas que me restringían a estar dentro de una forma humanoide y de las cuales no me podía liberar a voluntad.
Pasaron 230 años más entonces la oportunidad de salir se dio, un grupo de aventureros compuesto por un halfling, un humano descendiente de los Heart y una cría de dragón de bronce me encontraron, después de un pacto de ayuda con la cría de bronce que fue sellada con uno de mis verdes ojos, fui liberado.
Kurn Alurn se llamaba la cría de bronce, William Baggins el halfling, pero el humano llamado Andrew Lionheart, en él podía sentir un poco de la maldición de la herencia de Xion y esto les había permitido quitar las cadenas que me ataban. Ignorantes de lo que habían hecho les deje ir con algo de mi tesoro, uno de mis ojos como como símbolo para Kurn y la promesa de ayuda en el futuro.
Al salir, dentro de mis dominios había crecido varios nidos de pestes, un Reino enano de un tal rey Arun se había hecho paso en mi mina favorita y un grupo de ladrones, asesinos y escorias se habían juntado en un pueblo llamado Sodom.
Este pueblo era dominado por un carismático clérigo, un elfo calvo de orejas cortadas, todo el mundo le temía y respondían ante él, me comí este hombre y asumí su identidad asumiendo control del lugar. Empecé a ponerme al tanto de acontecimientos pasados durante mi ausencia y me entere de que un humano con armamento que no respondía a la magia más por el contrario la anulaba había creado un gran imperio al oriente del continente y se encontraba en guerra tratando de conquistar todo.
Mientras daba un pequeño empujón a Lionheart y su compañía contra el Conde Heart títere de Xion, empecé a preparar contingencias contra Yemayuin, el emperador de la Tecnarquia, un mago elfo tenía una interesante idea para un ritual arcano que terminaría con la barrera que cubría Tecnarquia, el nivel de poder y de talento arcano para diseñar semejante ritual era digno de la antigua magia draconica, ante tan impresionante ritual decidí ayudar y manipular alrededor de las personas que podían darle los componentes, de tal manera que tuviera éxito, debilitando efectivamente las ventajas del Tecnocrata, pero con una falla incluida asegurándome de que el elfo Thaered no sobreviviera el ritual.
La resolución de los eventos de estos tiempos no pudo ser mejor para mí, efectivamente el elfo Thaered desapareció, dejando un mago menos que preocuparse, después de la caída de la barrera de Tecnarquia, tropas, espías y otros cruzaron hasta este imperio, debilitando el poder de Yemayuin.
A estas alturas Lionheart había derrotado el vampiro y había restaurado sus tierras, llevándose gente a vivir allí, preocupado por su gente y el impacto de Tecnarquia, envió un espía que paulatinamente causo la división de este sitio. Lionheart por su lado había tomado la tarea de destruir a Xion, el cual estaba viviendo en “El Abismo”, tomando mi rol de facilitador le entregue el libro cárcel del abismo, donde las criaturas más aberrantes del abismo se encontraban, el libro funcionaba como una cárcel y mapa del lugar.
Mi plan consistía en que si Lionheart podía derrotar a Xion, ambos quedarían encerrados, sin poder dentro del libro, asi eliminaría la amenaza que producían estos dos humanos. Sin embargo lo imprevisto sucedió, Xion efectivamente fue derrotado, pero la divinidad de este al caer se repartio, entre Lionheart, William y un compañero de ellos a la épocas, Ariel el Ryujin.
Debo admitir que la idea de un dios humano caminando entre nosotros me aterro, podía ser que con todo mi juego y manipulación hubiera yo mismo causado la profecía?. Al pasar su espía a Tecnarquia Lionheart había derrotado prácticamente el solo a un Gran anciano rojo, nunca había visto antes alguien tan cercano al potencial de la profecía, un Dragón Slayer, y uno lo suficientemente bueno. Debía observar y buscar la manera de rápidamente voltear la situación.
Envenene al rey Arun de los enanos, mientras recuperaba un récipe de gran valor escondida dentro de mis dominios en el territorio enano. Lionheart fácilmente podía ahora deducir que había sido el culpable y autorizo la destrucción de Sodom en retaliación.
Lionheart estaba a punto de declararme la guerra, su nación: Leonaria, nacida y llena de guerreros lo seguiría rápidamente, sin embargo a él le importaba su pueblo, su esposa y sus futuros hijos, usaría esto para retrasar las cosas hasta estar en la mejor posición posible para atacarle. Con estas cosas en mente, le lleve hasta Aragonessem, y lo presente ante el concilio purpura, el cual logre reunir con una gran cantidad de dragones respaldando cada representante de la raza.
Andrew entendió el mensaje, o al menos lo que quise hacerle creer, los Dragones de Aragonessem me respaldarían en caso de que me atacara sin razón alguna, debía mostrar evidencia certera de mi mal actuar contra él, o el humano recibiría toda la rabia del continente de los dragones.
Lionheart se fue a cuidar su reino y yo tuve tiempo para crear el mío, Lo llame el condado de Alastar, y empecé a amasar mis fuerzas y mi tesoro. Este continente estaba lleno de humanos potencialmente destructores, así que destruiría el continente, para evitar futuras posibilidades.
Después de 30 años encontré el mecanismo perfecto, un poderoso mago, se había dado a la tarea de devolver la magia a la tierra, en ocasiones asistía o atracaba aventureros por sus objetos mágicos y había creado nexos elementales en varios sitios con nodos. Usando una Blighter pude probar mi teoría, cerca de Colonia en El Lago había encontrado el nexo elemental de agua, custodiado por una ninfa. Envié uno de mis hijos a usar una variación de la esfera de aniquilación, y el efecto fue maravilloso, Colonia que tiempo antes fuera de verdes bosques, empezó a secarse sus ríos, sus bosques, su tierra a volverse árida y arenosa.
Decidido a llevar el mismo tratamiento por todo el continente le di cacería al mago de la carreta durante 40 años, hasta que al final he podido capturarle, me ha tomado largo tiempo de tortura el sacarle la ubicación de los demás nexos, pero ya mi ejercito estaba listo, mi Blighter había producido suficientes esferas negras para colocar una en cada sitio
El ritual mágico que recupere de mis cuevas en territorio enano está listo también: “La muerte Blanca”, a pesar de que un grupo llamado “Caballeros Leonarios” este persiguiendo mis esferas negras, solo es cuestión de tiempo, Liberare a Laceret y al Constructo de Carne para que produzcan progenie para mi ejército, a Yemayuin llevo bastante tiempo envenenándole el oído para que me preste su potencial de destrucción contra Lionheart, luego será fácil destruirle a él con el acceso que me ha dado.
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