Alec Letter 1 (KOTOL 2)

Leonaria, Boreo 2 del Campo del trigo, 62Dl

Estimado

Veydann

Hubo un tiempo atrás en el que te conté mis cinco pesadillas, profecías de fuego, muerte y desolación. Como sabrás, la última de ellas me dejo el regalo de la juventud para tratar de evitarla, y me quito la vista como castigo para no poder ver el mundo si así lo hiciera.

Lionheart

Como desde siempre has sabido, mi mano estuvo constantemente metida en la redención del linaje de Lionheart, en facilitarles el camino a Andrew, Ariel y William para que hicieran su viaje hasta lo imposible y derrotaran al Falso Dios, a la aberración que representaba Xion.

Ariel

Mi última pesadilla sucedió después del retorno del Rey, en ella veía la tierra partirse en pedazos, solo roca muerta y árida deshaciéndose en terremotos y hundiéndose en el mar, cataclismos desde los verdes bosques de Muluar, hasta las gloriosas ciudades blancas de Leonaria, desde las oscuras tierras de Devilstad hasta los bosques verdes de Bosanast.

William Baggins

El agua pútrida y fétida en aquaria, las temperaturas quemando el aire en Ragastash, Istrikam y Tecnarquia ambas  despedazándose hacia sus ríos. Los reinos enanos atacados por bestias de las sombras, de lo profundo de la tierra, y el hermoso Lilindor en llamas rojas.

En las sombras de todo estaba el dragón negro, cazando y matando cada humano sobreviviente, asegurándose de  que nadie escapara al destino de las Tierras Hibridas, peleando con la sed y la fuerza que solo la supervivencia pueden conjurar.

En mi sueño, el dragón se posaba frente a mí y me bañaba con   su aliento ácido, el cual me cegaba antes de matarme, y el sueño fue como morir, pues mi voluntad debió luchar ferozmente para reponerse del vivido dolor en el cuerpo y en el alma por lo visto.

Desperté ciego, pero con los ojos abiertos a mi obligación, con las fuerzas necesarias para llevar a cabo lo necesario para defender estas tierras. Aunque poco sabía, tenía claro que la humanidad y la tierra eran la clave en todo. Durante mi tiempo como consejero en el desarrollo de Leonaria, me encargue de impulsar a que este sitio se convirtiera en la pluricultural humana, en dejar que cada posible cultura salpicara las costumbres, cada posible Dios bendijera estas tierras, todo el arte y el conocimiento fluyeran, para que el compás del destino produjera los mejores defensores.

El Dragon Negro

Mientras tú te encargaste del suelo, de su fortaleza, misterios y pasiones, yo busque en la fe, en los libros y en las personas por conocimiento, y así supe de su existencia…. Las orbes del balance…. En su afán  por restaurar la magia a estas tierras en un periodo de escasez, el mago misterioso de la carreta las  había activado, canales de poder diseñados por la divinidad, para mantener el equilibrio del continente, de los elementos, de las fuerzas que intervenían en él, pero aunque este noble acto fue en búsqueda de la prosperidad, la entrópica consecuencia creo debilidad, pues tierras que no dependían de tales medios se hicieron dependientes de dichos artefactos, y pasaría tiempo antes de que pudieran de nuevo funcionar solas.

El hombre dejó como guardián en cada sitio una poderosa Ninfa Paraelemental, creaturas de alta belleza y mortal habilidad, con una afinidad al espíritu de cada templo, de cada orbe, y en cada uno de estos lugares increíbles peligros que probarían a cualquiera que osara adentrarse en dichos territorios. Pero sería esto suficiente?, la maldad y la persistencia de la vida siempre tienen una manera de abrirse paso por todo los lugares del mundo….

Querido Veydann, tu que te has dado a la tarea de amar a las ninfas para conocerlas más de cerca, para poder estar allí en su momento más oscuro te confieso, que he buscado y cruzado descendencia de héroes para juntar nuestros defensores, que he buscado en la mística de los elementos y en la ciencia para darles mayor oportunidad de supervivencia a lo que les espera, pero aun no creo que sea el tiempo.

Sé que el valor de Helio de la espada del sol y de su unidad te ha parecido digno de la tarea, sé que la decadencia de colonia y sus tierras te ha dado más fe en mis palabras, y que probablemente el alcohol de las noches pueda nublar tu juicio. Pero la duda surge en mí, he tenido sueños de oscuridad y sangre…

Ten cuidado antes de enviar a los hombres a sus destinos Veydann, todos tienen un papel que jugar en esta historia. Lo presiento.

Alec.