Torre de Estigia, Villa de Garm, Boreo 18 del campo de las estrellas.
Querido hermano.
Nuestro día siguiente al evento del dragón ha sido bastante animado, parece ser que la caravana que transportaba la gente de Devistar y el Imperio enano de las Minas de Umbaer ha sido atacada, un pequeño contingente con los actuales regentes de estos sitios se desvió y han dejado la batalla al ejército Leonario y Enano. Un paladín y Amral de Muluard se habían hecho cargo del transporte de los nobles y nos hemos cruzado en el campamento.
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| Amral de Luena |
La villa de Garm que estaba al cruzar el rio, estaba bastante intranquila, rápidamente enviaron scouts a revisar qué clase de gente éramos, más los recién llegados, el manejo de la información del scout ha sido bastante escueto y al llegar a Garm nos hemos dado cuenta del porqué.
En la distancia a un par de horas de trote, un ejército de Orcos se aproximaba, y seguramente arrasaría a Garm, esta villa, compuesta más que todo por campesinos que se acomodaron a vivir debajo de la torre del mago, esperando su protección. no se encontraba en posición de resistir tal ataque, el mago de la torre no se había manifestado ante la posible amenaza a sus protegidos, y al ver nuestro porte de guerreros el scout nos involucró directamente en la línea que el ejército trazaría.
La decisión de quedarnos no fue fácil, analizando la situación era probable que encontráramos de estos ejércitos adelante, Hothet y Dael gracias a sus heridas aún no se encontraban en forma para afrontar un gran combate, no nos podríamos mover lo suficientemente rápido, y la gente no lograría escapar. Rápidamente una vez decidido que resistiremos en el sitio, procedimos a colocar trampas por todo el lugar, a reunir los campesinos y motivarlos, el trágico trabajo de tomar niños y convertirlos en guerreros, solo las mujeres, ancianos y niños se quedarían atrás en un sótano y yo tomé el solemne voto de protegerlos.
Mientras los demás se preparaban para las ultimas horas de batalla, una malignidad comenzó a flotar en la villa, se movía de un lado a otro, a gran velocidad, como si su presencia saltara en el espacio, Dael y Hothet tomaron el resguardo del sótano y yo me quede en la parte de afuera, esperando a que Sven terminara de ayudar a fortalecer las barricadas. Me concentre en la presencia que saltaba y momentos después la sentí tras de mí, era una hermosa mujer, con vestimentas altamente provocativas, una daga en sus manos y la firme intención de atravesarme con ella.
La salude y me revele ante ella, son personas como esta del tipo que están demasiados acostumbradas al poder, a que la gente les tema, fue agradable ver en su rostro la sorpresa de alguien que no le temía, el tono de nuestra conversación fue variado, de primero querer intimidarme, la hermosa súcubos quiso seducirme luego, curioso que una criatura tan malvada pueda llegar a ser tan atractiva, un par de segundos después, al haber dejado en claro que de cruzar las puertas de aquella casa de nuevo seria mi rival, se deshizo en el aire, dejando solamente la silueta de humo de su exuberante cuerpo, en ese momento como si no hubiera otro más preciso, el paladín enano atravesó la puerta, con mirada inquisitiva, buscando la presencia que ya no estaba, sonreí para él y con la actitud más valiente le dije que cuidaría de este sitio.
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| La sucubus del Campamento |
Shiki y Amral mantuvieron un largo rato el ataque desde las torretas de vigilancia de la empalizada que rodea la villa, en determinado momento el ataque de sombras y de grandes bugbears hizo imposible seguir cuidando esta posición y tuvieron que bajar a ayudar a Onan y Kathrynn que sostenían un camino creado con trampas para la oleada de orcos que fue el ataque inicial.
El enano paladín, junto con el regente y una maga local de Garm aplacaron la entrada por el otro flanco, encargándose de un par de bugbears y de Aracneas que llegaron con la directa intención de atacar a los campesinos.
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| Aracneas |
En el clímax del ataque cuando todos se ocupaban de las Aracneas y de unos cuantos Azer que llegaron, el regente enano no pudo resistir la furia y corrió al enfrentamiento contra la súcubos, fue un valiente esfuerzo, logro hacerle gran daño a la demoniaca y sexy entidad, rompiendo y rasgando su armadura, destrozando su escudo, sin embargo la osadía le costó la vida, pues su oponente en respuesta le ataco viciosamente con sus garras, causándole heridas que le mataron casi instantáneamente.
Para horror del paladín enano que corría al encuentro de su compañero, el cuerpo de su compañero fue desecrado con magia por su enemigo y dejado en las peores condiciones posibles, y antes de siquiera poder darle la satisfacción de la venganza, de la justicia por lo hecho, la súcubos volvió a desvanecerse en el aire y se retiró del campo de batalla.
La batalla fue ganada por muy poco, sin embargo, analizando los números que llegaron pude deducir que definitivamente por Garm no paso ni la mitad del ejército que venía, parece que el atacar la villa fue solamente una diversión para algo más.
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| El regente Enano |
Después de la batalla y la caravana con los sobrevivientes y de Devistar, Amral y el Paladin enano han partido, Hothet y Dael se han recuperado un poco ya y se encuentran prestos para subir a la torre del mago, a padre nunca le agrado mucho este tipo así que prefiero quedarme abajo, no averiguare porque es así.
Envía saludos a nuestra hermana
Aios Lionheart
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